Los Huéspedes

Por la falta de caracteres de la felicidad entramos en el pensamiento distante de lo cercano, teniendo en cuenta que nada es seguro. Entre dudas y alborotos rompemos hielo, decidimos acercarnos al calor distante y hacerlo propio, como si fuese un asunto personal. Los hallazgos de nuestros encuentros son no más que sorpresas, en ocasiones felices, en otras, ciegas, sordas y mudas.

Sonámbulos en nuestros días, distantes del sueño y la armonía… entramos en paranoia ante lo que no conocemos, estamos siendo atacados (¡en guardia!)… en cada segundo e instante pensamos en la invasión a nuestra paz, nuestra gran… más grande mentira. Soltamos las barreras un solo segundo y empiezan los bombardeos de sentimientos, para luego al subirlas, sentirnos con una masiva inseguridad sobre lo que conocemos como cierto… y solo la duda que permanece es la única verdadera realidad.

Enloquecemos con esta verdad, con esta duda que causa un chillido en nuestro cerebro… “¿Será realmente cierto?” “Acaso… ¿estoy sintiendo algo?” Duda continuamente, ya que estarías cada vez más cerca de la verdad. No es error el dudar, es la única acción que acerca al hombre a la verdad, a su verdad, a su persona y realidad. No tenemos nada dado por cierto y esto específicamente, causa gran inseguridad. Tirarse al rio sin saber si esta frio; tirarse a un examen sin estudiar; tirarse desde un helicóptero sin paracaídas… sin riesgo, no hay fortuna (¡pero tampoco se pierde!). La pregunta siempre es la misma en cuanto el obrar o dar por sentado… y una vez más llueven las dudas.

Océanos vacíos de pensamientos.

Lagos llenos de amarguras.

Vidas enteras, largas noches.

Los huéspedes del vacío no logran comunicarse;

Sus camas están listas, sus hogares… no existen.

A pesar de lo incierto, dado por seguro,

Lo real vuelve y lo cierto, no es cierto mas.

“A carcajadas” nos dice la vida,

“A gritos” grita la Luna.

Porque el sol no es sol si no alumbra

Y el cielo no es cielo si no se oscurece,

Como también el agua no es agua

Si esta, no moja.

Así también, la vida no es vida

Si usted, no sonríe.